Hermosillo, Sonora - El Estadio Héroes de Nacozari se transformó anoche en un epicentro de energía, baile y empoderamiento femenino, cuando la superestrella mundial Shakira desató su aclamado tour "Las Mujeres Ya No Lloran World Tour". Ante un público eufórico y completamente entregado, la artista colombiana ofreció un espectáculo inolvidable que reafirmó su estatus como una de las figuras más influyentes de la música latina.
Desde el primer acorde, la atmósfera se llenó de una electricidad palpable. Shakira emergió en el escenario con su característico torbellino de cadera, comenzando con una poderosa versión de "Puntería" que sirvió como una declaración de intenciones. El concierto fue un recorrido magistral de su carrera, intercalando los éxitos que la catapultaron a la fama global con las nuevas canciones de su último álbum, que da nombre a la gira.
El setlist fue una joya para los fanáticos, combinando la nostalgia de temas como "Ciega, Sordomuda", "Estoy Aquí" y "Antología" con la intensidad de sus recientes hits, "TQG", "Shakira: Bzrp Music Sessions, Vol. 53" y "Monotonía", canciones que el público coreó a todo pulmón, reflejando una profunda conexión con las letras de desamor y resiliencia que se han convertido en himnos. La reacción del público en Hermosillo a estas canciones fue particularmente intensa, demostrando que su mensaje resonó con una gran parte de los asistentes.
El espectáculo no solo fue un despliegue vocal y musical, sino también una producción visual de primer nivel. Con impresionantes efectos de luces, pantallas gigantes y un cuerpo de baile que la acompañó en cada movimiento, Shakira ofreció un show dinámico y visualmente impactante. A pesar de los años, la artista demostró una forma física envidiable, ejecutando sus icónicos movimientos de danza del vientre con la misma precisión y pasión de siempre.
Un momento emotivo de la noche fue cuando Shakira se dirigió al público para agradecer el cariño y la calidez de Hermosillo. Con una sonrisa radiante y visiblemente conmovida, expresó su alegría por volver a la ciudad y por la energía que el público le transmitió. "Gracias, Hermosillo, por ser parte de esta noche. ¡Las mujeres ya no lloran, las mujeres facturan!", bromeó, citando uno de sus versos más célebres, lo que provocó una ovación ensordecedora.
El concierto de Shakira en el Estadio Héroes de Nacozari no fue solo un evento musical, sino una celebración de la fuerza, la vulnerabilidad y la capacidad de las mujeres para levantarse más fuertes. Fue una noche en la que miles de voces se unieron para cantar, bailar y reafirmar que, más allá de los desafíos, la música es un refugio y una poderosa herramienta de empoderamiento. Con este concierto, Shakira dejó claro que su reinado en la música no tiene fecha de caducidad y que su conexión con su público es más fuerte que nunca.
